lunes, 2 de febrero de 2015

Concienciados (I)


Imagina la situación. Vas al médico y te dice que tienes un virus que hace que te sientas mal y que no puedas hacer una vida normal. Hay una vacuna que, como mínimo, te hará sentir mejor y que, si te pones todas las dosis es muy probable que te pongas bien.
- ¡Estupendo, recétemela!- le dices
- No- te espeta el médico- es que no la tenemos disponible aunque sepamos que funciona.

El enfado tuyo sería monumental, y en el momento en el que hubiera casos suficientes para ello, esto saldría a la palestra y las manifestaciones para que la vacuna de marras estuvieran disponibles no se harían esperar. ¡Con toda la razón del mundo!
Sin embargo, si nos vamos al plano educativo, eso es lo que está pasando: tenemos una vacuna que nos promete que la incidencia de problemas de aprendizaje y dislexia se podría reducir en un 70% y no la aplicamos. ¡Qué locura!, ¿verdad?
Tanto el Simple View of Reading Model como el National Reading Panel resaltan la importancia de sistematicidad en el trabajo precoz de CONCIENCIA FONOLÓGICA, VOCABULARIO Y COMPRENSIÓN y además, especifican que deberían de ser enseñados de un modo explícito y sistemático.  Posiblemente sea esta sistematicidad la que falta en nuestras aulas.
Vamos a entrar en harina e iremos, entrada a entrada, abordando estos aspectos, para construir la casita más sólida


Centrándonos en la Conciencia Fonológica, es cierto que ésta se trabaja en Educación Infantil, Si, es verdad que lo hacen. Pero no todos, no de manera sistemática, no abordando todos los niveles… sí, la conciencia fonológica tiene “niveles” (próximamente, en sus pantallas)
Pero, vamos por partes, ¿qué es la conciencia fonológica? Estamos hartos de oír su nombre y a lo mejor no sabemos qué es exactamente.

Nos vamos a quedar con la que nos dice Silvia Defior, importante investigadora de la Universidad de Granada, quien dice que la conciencia fonológica “es un espectro de habilidades relacionadas con la comprensión de que las palabras habladas están compuestas por sonidos y la capacidad de manipularlos”. Me gusta especialmente esa parte de la definición, en la que se incide en la “capacidad para manipula los sonidos” porque nos encontramos con niños que saben que son las palabras, sílabas y letras pero son incapaces de manipular estos segmentos del habla sin la ayuda de la escritura.
Nuestro programa incide en hacer pensar a los niños y niñas sobre su lenguaje antes de enfrentarse a la lectura; que jueguen con el lenguaje en todos sus componentes, desde la frase hasta el fonema y que disfruten “destripándolo”. Damos fe de que, si se les da la oportunidad lo hacen. Disfrutan…, ¡y de qué manera!
Ya sabemos que la conciencia fonológica es señalada como fundamental tanto en el National Reading Panel como en el Simple View of Reading Model. Pero éstos, a su vez, ¿en qué se basan?
Son muchos los estudios que avalan la relación entre conciencia fonológica y lectoescritura. Destacamos estudios de Bryant y Bradley en 1983, Ziegler y Goswami en 2005, o en nuestro país podemos señalar algunos como los realizados por Carrillo y Marín en 1995 o Defior, en 2008. En todos ellos, la conciencia fonológica viene siendo señalada como el principal predictor del aprendizaje de la lectura en todas las lenguas estudiadas desde hace ya mucho tiempo.
A todo esto, hay que añadir la afirmación de Silvia Defior de que la Conciencia Fonológica no emerge de manera espontánea sino que hay que hacer un entrenamiento concreto.
Blanco y en botella, ¿no? Si la conciencia fonológica es el más poderoso aliado de la lectoescritura y el principal predictor de problemas lectores, y por otra parte sabemos que ésta no emerge de manera espontánea y que precisa de un entrenamiento, se hace evidente la necesidad de una estimulación sistemática en educación infantil

Desde hace ya mucho tiempo podemos encontrar Programas de Entrenamiento en Conciencia Fonológica, dirigidos al alumnado de Educación Infantil, como el de Lundberg, Frost y Petersen de 1988.
Sí, desde antes del 88 ya se hablaba de la necesidad de programas de estimulación de la conciencia fonológica como medio fundamental para el abordaje de la lectoescritura, aunque en los últimos años los estudios le unen la necesidad de abordar otras habilidades orales.
A mí se me ponen los pelos de punta al comprobar que llevamos ¡30 años! desoyendo lo que los investigadores en la materia nos vienen gritando. Es de una irresponsabilidad supina el hecho de que, pese a cambiar las leyes educativas cada 4 años a gusto del que está gobernando, no se recojan evidencias científicas tan concluyentes
Si todo esto queda ampliamente demostrado, es difícil entender que el trabajo de estos aspectos no sea algo generalizado en nuestras aulas de Educación Infantil. Porque nos evitaríamos tal cantidad de problemas que es una temeridad no hacerlo cuando la base científica es tan sólida.
De acuerdo que no somos nosotros los que tenemos en nuestra mano legislar, pero sí podemos demostrar que aplicar la teoría es lo que funciona. ¡Y que eso es lo que queremos!
En las próximas entradas, iremos desmenuzando un programa de estimulación de Conciencia Fonológica y otras Habilidades Orales; os mostraremos cómo lo hacemos y por qué lo hacemos así. Porque no podemos andar a ciegas; porque nuestros pasos en Educación tienen que tener la base sólida.

El primer paso es concienciarnos de que podemos hacerlo mejor; del peso que tiene la Conciencia fonológica en todos sus niveles y que tenemos fuentes de aprendizaje que nos guían en ese proceso. 
¿Eres consciente?






5 comentarios:

  1. No se puede comunicar mejor esta situación que es alarmante, cuando mínimo, por no decir, negligente. Te animo a que sigas con tu cruzada.
    Juan Luis Luque

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  2. Gracias por tu comentario. En esta cruzada cuento con los mejores, con los que me habéis abierto los ojos a mi. Un besote!

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  3. Esperemos que poco a poco vayamos incorporándonos a esta cruzada muchos centros, y lo que ahora es algo excepcional en nuestra comunidad, se convierta en algo general. Todos saldríamos ganando, pero especialmente los mas importantes, nuestros alumnos y alumnas.

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  4. Gracias por la clara exposición de la realidad.
    Una vez conocida, ¡no hay vuelta atrás!
    Un abrazo.
    Montserrat Morales Moreno

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  5. Y yo me pregunto, ¿por qué nos cuesta tanto cambiar? ¿Es por ese estado de confort en el que entramos cuando estamos en una zona segura?
    Pero una vez que conocemos cuáles son los aspectos que debemos cambiar, cómo hacer y cuándo, tenemos la obligación de llevarlo a la práctica. Comenzar el camino (quizá para vosotras la andadura lleva un largo recorrido ya) pisando sobre firme y sembrar lo que será prevención de dificultades, detección temprana de las mismas e intervención precoz y eficaz.
    Muchas gracias a Auxi y Mariam por hacer posible que conozcamos estos aspectos principales en el aprendizaje lectoescritor y hacer posible que lo llevemos a la práctica.

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